viernes, 24 de abril de 2009

La "regla"

Parecería que sólo llega una vez al mes. Algunas veces ocurre de manera dolorosa. Días antes mi estado de ánimo cambia de forma repentina y se me alteran los humores, como si fuera un preaviso de su arribo. Creo que a mi edad es posible verla más de una vez, que dure el mes completo y, en ciertas ocasiones, no llegar a verla nunca. Su ausencia puede ser un presagio de que haya un decaimiento físico o de otra naturaleza. Ahora, calculo que fue hace un mes exactamente la última vez que se me presentó, aunque hubo varios “amagos” en las semanas anteriores y finalmente, no pude verla hasta el día de hoy.

La verdad es que cuando viene, siento alivio. Y es porque la musa que me anima a escribir en este blog, ya se me está presentando mensualmente, como una especie de "regla". Si me descuido con los compromisos, trabajos y prisas, es posible que no vuelva a encontrarla y me vea condenada a la menopausia del ciberespacio.